En noches blancas se presenta
ante nosotros dos espíritus solitarios, que en los azares de la vida se
encuentran. Antes de mencionar someramente los hechos que componen este
maravilloso escrito debo decir que no juzgaré a ninguno de los dos personajes de
la historia como hipócritas desalmados o masoquistas; ellos estaban ubicando un
punto en el cosmos a quien dejar su amor, lo mismo que a todos nos sucede.
El personaje principal es el
narrador. Comienza contando su solitaria y aburrida vida y cómo transcurren los
días sin que nada suceda, hasta que conoce a Nastenka, quien acepta su amistad
luego de topasen mientras deambulaban por la ciudad.
El hombre es solitario
porque dice no tener buen éxito verbal con las mujeres, al Nastenka aceptar su
compañía, éste se enamora perdidamente, lo trágico aquí es que ella
también le galanteó pero se traía una extraña conducta y le ofrecía un amor no
más pasado de la amistad, pues lo alude como un hombre bondadoso y bueno, pero
su verdadero sentimiento de pareja le pertenece a otro hombre que hace un año
no ve.
Cuando en Dostoievski parece
que habrá un final feliz, las ilusiones se hunden, ella parte al encontrarse con el
hombre que ama y que hacía un año no la buscaba, dejando a nuestro narrador en
el desconsuelo de la soledad nuevamente, a pesar de que nuestro personaje
principal había aceptado ayudarle a olvidar aquel hombre y comenzar entre los
dos una amistad más amorosa y sostenible emocionalmente.
A decir verdad, estaba
esperando llegar a este relato, me habían hablado extremadamente bien de él, es
más, cuando se lee una biografía de Dostoievski, casi siempre la mencionan como
una de las obras exquisitas.
No juzgaré al personaje
principal de idiota o romántico, sencillamente dejó andar su corazón, y cómo no
se iba a enamorar si tenía poca experiencia amorosa y su soledad sólo le aconsejaba buscar otra persona para darle amor, por esa razón es que salía constantemente y deseaba saludar a alguien. Nastenka esa hermosa mujer no tenía un corazón malvado, ella
sólo había sabido amar a un hombre, además desde un inicio fue muy sincera y le
expresa a nuestro narrador que no se podían enamorar, incluso
le dijo que lo amaba pero como un amigo, entre sus pensamientos no estaba
hacerle daño, ni burlarse de él, ella sólo amaba a otro hombre y en el narrador
encontraba apoyo, felicidad, amistad, sabiduría en fin…
Estos dos personajes son en
realidad un reflejo del hombre que en solitario busca un apoyo, un motivo tan siquiera
mínimo a quien dejarle su energía, evidenciando a flor de piel los sentimientos
humanos que la razón no podría explicar.